VALORACIÓN CURSO TDAH

          La diversidad del alumnado es una realidad incuestionable que nos encontramos en los centros educativo. Como profesionales debemos darles una respuesta educativa adecuada y de calidad, lo que implica la profesionalización del docente para ofrecer respuestas educativas simultaneas y diversas. Y en este curso lo hemos constatado.

         Hay que dejar atrás los estándares preestablecidos y asumir y valorar la heterogeneidad. Entre la heterogeneidad del alumnado nos encontramos a los alumnos con TDAH.

          En este curso hemos tomado conciencia de que estos alumnos simplemente necesitan una medidas diferenciales en la metodología de enseñanza para poder tener un aprovechamiento adecuado.

          Ha cambiado mi visión acerca de este trastorno. Atrás quedarán las retahílas típicas que se hacen a estos niños: "no escucha, está en las nubes, es inquieto, rompe todo, se distrae, no termina las tareas, es rechazado...". Hay que aprovechar lo positivo: son curiosos,espontáneos, divertidos, colaboradores, sensibles, persistentes, creativos, arriesgados, extrovertidos, pueden pensar soluciones ocurrentes para resolver problemas....

     Hemos llegado a la conclusión de que los alumnos con TDAH no son capaces de atender lo suficiente para aprender lo que se les enseña, no pueden controlar la ejecución de las tareas de forma organizada, no son capaces de retener la información de forma adecuada, no parecen modificar su comportamiento a los resultados o razonan de forma extraña, no pudiendo elaborar los trabajos de forma correcta. De la misma manera hemos aprendido estrategias para poder atender estas dificultades,aumentando nuestra confianza a la hora de atenderlos.

          Juntos podemos conseguir muchos avances ya que como se suele decir la unión hace la fuerza: equipo sanitario, equipo educativo, familia...

          También cabe destacar el uso de las nuevas tecnologías aplicadas al curso: elaboración del blog, Diigo...

          Estoy muy satisfecha con la realización del curso, especialmente me ha gustado las intervenciones de algunos docentes que a su vez son padres de un niño con TDAH contando su experiencia. Veo un curso muy útil y práctico que recomiendo a todo aquel que se relacione con alumnos con TDAH.

"Cualquier niño motivado, tiene ganas de aprender, tenga o no TDAH".

ORIENTACIONES A FAMILIAS CON HIJOS CON TDAH

ORIENTACIONES A LAS FAMILIAS DE ALUMNOS CON TDAH

       Mantener un contacto continuo entre profesores y familias es primordial, puesto que la intervención que se debe llevar a cabo con un alumno con TDAH tiene que ser multimodal, en la que tomen parte activa todos los agentes que intervienen de manera directa con el alumno: familia, el centro escolar y agentes externos que puedan trabajar con él. Para mantener este contacto continuo es recomendable fomentar con el profesor citas regulares. Entre las orientaciones que daremos a los padres están las siguientes:

• Planear conjuntamente unos objetivos realistas tanto para padres como para profesores para llevar a cabo tanto en casa como en el centro escolar.
• Mantener una situación estructurada en la casa, con horarios constantes y evitando estímulos demasiado llamativos.
• Alejarle de los estímulos que puedan distraer su atención. Al principio se quedaran con ellos haciendo actividades que requieran un nivel de atención elevado, y se irán retirando y dejándolos solos cada vez más tiempo.
• Cuando parece que no oye lo que se le dice, sujetarle la cabeza con las manos, mantener la mirada y hablarle con voz suave, sin enfadarse pero firme. Después pedirle que repita lo que se le ha dicho y si no lo recuerda, volver a repetirle el mensaje de la misma manera.
• Pedirle a su hijo que anote en una libreta aquello que necesite recordar.
• Escribir notas recordatorias y colocarlas en lugares visibles: espejo, frigorífico, armario...
• Crear una rutina diaria y utilizar alarmas: despertador, móvil...
• Elaborar una lista y un calendario con lo que necesita hacer.
• Fijar una fecha o una hora límite para cada tarea y asegurarse de que las termina.
• Favorecer el trabajo en un ambiente silencioso.
• Cuando su hijo esté trabajando, permitirle pequeños descansos y evitar que haba varias cosas a la vez.
• Es muy aconsejable que practique ejercicio físico y siga una dieta equilibrada, así como que duerma las horas suficientes.
• Es importante prestar atención al niño escuchándole y hablándole con paciencia, comprendiendo su patrón de conducta y explicándole los planes para ayudarle.
• Las pautas de actuación del padre y de la madre deben ser las mismas, para que su hijo no note discordancias.
• No ser demasiado permisivo, se le proporcionarán pocas normas de conducta pero serán claras y coherentes.
• Utilizar los intereses del niño empleándolos como motivación para ayudarle a aprender de forma eficaz.
• Comunicarle con suficiente antelación cualquier posible cambio en la dinámica del hogar de manera que pueda adaptarse a ella.
• Hacerle partícipe de las tareas domésticas en función de sus capacidades y alabarle cuando intente actuar por sí mismo.
• Comentar tranquilamente con el niño sus malas actuaciones pensando en alternativas para no repetirlas.
• Diferenciar entre conductas voluntarias e involuntarias.
• Controlar conjuntamente la mochila antes de ir al colegio.
• Evitar llamadas de atención en público y tener en cuenta que su comportamiento empeora en ciertas situaciones con menor control: cumpleaños, reuniones...
• El castigo será la ausencia de premio y utilizar el refuerzo positivo con un sistema de puntos. Después de un castigo recibirán con aceptación al niño sin recordar la conducta que motivó el castigo.
• Emplear técnicas de autoinstrucciones.
• Utilizar la agenda para mejorar la organización personal y al mismo tiempo comunicación escuela-familia.
• Los profesores están muchas horas al día con los niños, por lo que es fácil observar tanto los efectos positivos de la medicación como los negativos (si la tomase), su información a los padres es muy valiosa.
• No exponer al niño a situaciones demasiado competitivas que le creen ansiedad.
• No desanime al niño a establecer relaciones con amigos que sean un año o dos más pequeños.

       En definitiva, se trata de convertir el entorno familiar en un ambiente favorecedor para el niño con TDAH y no en un ambiente hostil.

    Hay que trabajar conjuntamente y valorar el trabajo realizado por profesores y familia. Los profesores deben de saber que la familia está ahí para ayudar a que el niño mejore y la familia debe asegurarse de que el profesorado pondrá la voluntad y los medios necesarios para ello.

ENTREVISTA

Las entrevistas y reuniones con los padres de alumnos con TDAH son esenciales para establecer una óptima relación entre los profesores y los padres, y de las cuales sacaremos una serie de conclusiones que nos llevarán a garantizar un mayor éxito en nuestra intervención. Lo ideal es que se realice en tres tiempos: entrevista con los padres y alumno, solo el alumno y los padres solos. En presencia de los tres, se observa cómo interaccionan entre ellos, y las reacciones de todos. Con los padres a solas, se tratan algunos temas que ellos consideren inadecuado tratar en presencia de su hijo. También se comprueba si existen diferencias entre la visión del padre y de la madre. La visión del niño cuando se le entrevista a solas puede ser muy diferente a la de los padres. Entre los datos que recogeremos en la entrevista, tenemos:

• Nombre del alumno
• Fecha de nacimiento
• Sexo
• Fecha de la entrevista
• Nombre del padre Profesión
• Nombre de la madre Profesión
• Anamnesis, donde se recogerán datos sobre su desarrollo, antecedentes perinatales y personales, respuesta a tratamientos anteriores, antecedentes familiares, factores traumáticos en la vida del niño.
  
  
  Entre la preguntas que plantearemos a los padres tenemos las siguientes:

• ¿A menudo no presta atención suficiente a los detalles o incurre en errores en sus actividades?
• ¿Cómo ha sido su infancia?
• ¿Tiene dificultades para mantener la atención en las tareas o actividades lúdicas?
• ¿A menudo parece no escuchar cuando se le habla directamente?
• ¿Sigue instrucciones? ¿Acaba las tareas escolares, encargos u obligaciones?
• ¿Tiene dificultades para organizar tareas y actividades?
• ¿A menudo evita o le disgusta realizar tareas que requieren un esfuerzo mental sostenido?
• ¿Pierde a menudo objetos necesarios para sus tareas o actividades?
• ¿Se distrae con estímulos irrelevantes?
• ¿Es descuidado en sus actividades diarias?
• ¿Se mueve en exceso?
• ¿Corre o salta en situaciones en las que es inapropiado hacerlo?
• ¿Tiene dificultades para jugar o dedicarse tranquilamente a actividades de ocio?
• ¿Habla en exceso? ¿Precipita respuestas antes de haber sido completada la pregunta?
• ¿Tiene dificultades para guardar el turno?
• ¿Interrumpe o se inmiscuye en las actividades de los otros?
• ¿En qué ambientes se altera más el niño?
• ¿Toma medicación?
• ¿Qué pautas de actuación han seguido hasta ahora con el niño en casa?

OBSERVACIONES: